El principal uso del aceite de coco se refiere al tratamiento de los problemas digestivos, tales como acidez y reflujo gástrico; asimismo, puede ayudar en la pérdida de peso, ya que al consumir una cucharada antes de cada comida, se contribuye a generar una sensación de saciedad que evita consumir una mayor cantidad de alimentos.
Los niños que sufren de neumonía se ven beneficiados con el consumo de aceite de coco, se debe combinar este elemento con la ingesta de los antibióticos recomendados por el especialista para eliminar los microbios que causan la enfermedad.
A nivel externo, se puede utilizar este aceite para curar las heridas y evitar que se infecten, mejora el nivel de hidratación del cabello y revitaliza la piel seca.
Anímate a utilizar el aceite de coco regularmente y disfruta de sus beneficios.
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