Lavanda

La planta de lavanda, conocida también como lavándula, es muy popular en varios lugares del mundo por el uso ornamental que se hace de ella y, además, por sus características aromáticas. Sin embargo, no se conocen mucho las propiedades medicinales que posee. Estas se encuentran concentradas principalmente en las flores de la planta. La lavanda, cuyo nombre científico es Lavandula officinalis, posee propiedades sedantes. Debido a lo anterior, la planta de la lavanda es muy útil para tratar casos de insomnio que deriven del sufrimiento de estrés o de nerviosismo.

Por otro lado, la lavanda tiene excelentes propiedades antivíricas y antibacterianas, estando especialmente recomendada para tratar casos de faringitis y resfriados en general. Para estos casos es necesario realizar gárgaras con la infusión de flores de lavanda previamente descrita. 

Además, el insomnio puede ser desencadenado por el estrés o por nerviosismo, por lo tanto, la lavanda puede ser recomendable para tratar trastornos del sueño. Para estos casos se aconseja realizar infusiones con flores secas de esta planta y beberlos antes de dormir.

La planta de la lavanda es muy conocida por sus propiedades medicinales para aliviar el dolor, debido a esto se recomienda su utilización para el tratamiento de diversos casos; por ejemplo, el de espalda y el de pie. También se puede utilizar para aliviar los dolores de las enfermedades reumáticas y para casos de torticolis.

Las flores de la lavanda presentan propiedades que ayudan a disminuir la presión arterial, por lo cual se encuentra bastante utilizado a nivel casero el tratamiento de la hipertensión en base a esta planta.

Esta planta es muy útil para tratar heridas, ya que posee propiedades que ayudan a desinfectar y cicatrizar las heridas.  Para estos casos es necesario mezclar una cucharada de flores secas(el doble de cantidad si son flores recién extraídas de la planta) en un vaso de agua y aplicarlo sobre la herida.

Si cuentas con flores de lavanda (frescas o secas) puedes consumirlas en forma de té para tratar diversas enfermedades; de igual modo, algunos especialistas recomiendan colocar 2 gotas de aceite esencial de lavanda en cubitos de hielo y agregarlos a las bebidas.

Al consumir la lavanda se alivian los signos y síntomas de: estrés, ansiedad, fatiga, irritabilidad, dolores de cabeza, migraña, insomnio, depresión, resfriados, problemas digestivos, flatulencias, alteraciones del hígado, nervios, mal aliento y pérdida de apetito.

Para utilizarlo de manera externa, el aceite de lavanda es excelente para aliviar lesiones en la piel, y puede ser aplicado directamente sobre cortadas, raspones, quemaduras, picaduras de insectos, erupciones, dolor muscular, reumatismo, úlceras bucales, y pie de atleta; solamente debes frotarlo con suavidad sobre el área afectada.

Esta planta también puede ser utilizada para mejorar la belleza, ya que al usarse el té de lavanda como enjuague elimina la caspa; de igual modo, las flores secas se pueden utilizar en áreas de la casa para aromatizar y repeler insectos.